Jessica Vargas Gómez se sentó en el sillón municipal en enero de 2023. Sin embargo, en poco más de un año, su gestión se ha visto ensombrecida por una serie de irregularidades, especialmente ligadas a las contrataciones a personas cercanas de su ámbito personal.
Marco Polo Portocarrero Wong, compadre de la burgomaestre, y quien no registra grado universitario ante SUNEDU, ha facturado a la fecha 42 mil soles de las arcas municipales. Por concepto de “gestión operativa para la Gerencia de Cultura y Deporte” ha brindado cinco órdenes de servicio, tal y como registra el portal de Transparencia. Sin embargo, no es el único integrante de la familia que empezó a trabajar en la Municipalidad.
Allison Scarlet Portocarrero Velarde, hija de Marco Polo Portocarrero, obtuvo cuatro órdenes de servicio por concepto de orientación y ha cobrado a la fecha 18 mil soles. Mientras que el hermano del referido, Manuel Julio Portocarrero Wong, también facturó en la misma comuna y obtuvo S/ 1750 por servicios de pintado.
Según el registro fotográfico de hace ocho años atrás al que Caretas tuvo acceso, la alcaldesa es madrina del hijo menor de Portocarrero. En las fotos publicadas en redes sociales, se aprecia a Portocarrero junto a Jéssica Vargas y su familia.
“Esta situación me causa extrañeza y me sorprende porque lo primero que debería estar es la ética profesional. Para eso fuimos elegidos (…) Debería de revisarse y ver cuál es la situación actual de estas personas” sostiene Fiorella Muñoz, regidora de su misma agrupación: Renovación Popular. Sin embargo, esta no sería la única irregularidad vinculada a la gestión edil.
Donación interesada
El 19 de octubre, en sesión de Concejo Municipal, se acordó dar luz verde para aceptar donaciones de una empresa que tiene significativas cuentas pendientes con la misma municipalidad.
Por mayoría, se votó a favor de aceptar la donación de dos trimotos de carga, ofrecidos por la empresa Representaciones Peruanas del Sur S.A (Repersa) encargada del recojo de basura. Sin embargo, no se recabó en que esta tiene tres alertas en su contra presentadas por la Contraloría y que, precisamente por ellas, debe a la Municipalidad de Barranco un total de S/ 375, 771 soles en penalidades.
Dos semanas antes de que se aprobara la votación, el jefe del Órgano de Control Institucional, Roberto Pizango, ya había alertado a la misma alcaldesa las recomendaciones del informe y comunicó que había enviado una copia a la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción.
El Informe de 28 de setiembre del 2023 denominado “Servicio de Recolección, Transporte y disposición final de residuos sólidos en el distrito de Barranco” había puesto de manifiesto una serie de incumplimientos en el recojo de residuos: tramos no recorridos, choferes no calificados, incumplimiento del horario, entre otros.
En una decisión por lo menos incompatible, la alcaldesa optó por destacar esta donación de la cuestionada empresa como un “logro”. Temerosa de la rendición de cuentas, Vargas ha optado por no responder los pedidos de información, ni siquiera la de los mismos regidores. Según se tiene conocimiento, a la fecha el contrato con la empresa de recojo de basura sigue vigente, y la deuda, también.